Las regulaciones sobre el consumo de alcohol varían de un país a otro. Por ejemplo, en Colombia, la edad legal para beber es de 18 años, mientras que en Japón es de 20. Además, en situaciones como las elecciones presidenciales, Colombia puede imponer restricciones temporales en la venta de alcohol para prevenir disturbios. Lo que para los japoneses puede parecer normas muy estrictas.
También, En varios países occidentales, se prohíbe el consumo de alcohol en espacios públicos y la venta nocturna de bebidas alcohólicas. En Japón, aunque hay penalizaciones severas por conducir bajo la influencia del alcohol, las personas mayores de 20 años tienen la libertad de comprar alcohol en tiendas y supermercados en cualquier momento. El consumo de alcohol en público, como en parques y calles, es socialmente aceptable, y no es inusual ver a personas ebrias en áreas urbanas durante la noche. En este tema Japón parece ser más flexible en cuanto a las normas del consumo de alcohol.
Adicionalmente, en Japón, durante el Año Nuevo, es tradicional que personas de todas las edades beban ‘Otoso’, un sake especial, como parte de un ritual para desear salud y longevidad. Aunque hoy en día es común que los menores simulan participar en este ritual, refleja la naturaleza arraigada del alcohol en la cultura japonesa. A pesar de que el alcohol es técnicamente una neurotoxina, se ha integrado profundamente en las costumbres sociales y la vida cotidiana.
En las licorerías de las zonas rurales de Japón, se ofrece una diversidad de bebidas alcohólicas provenientes de todo el mundo, incluyendo cerveza, cócteles, whisky, vino y tequila. Además, cada ciudad, pueblo y aldea se enorgullece de su propio sake local, contribuyendo a la rica variedad de opciones disponibles. En la cultura japonesa, durante el consumo de alcohol, se relajan las normas sociales bajo el concepto de “Bureiko”, permitiendo cierta libertad en el lenguaje y comportamiento que normalmente serían inaceptables.
Aunque, claro depende de la gravedad. Muchas veces se excusa el comportamiento indebido con la frase “estaba borracho”, lo que puede ser visto como una forma de indulgencia social. No es raro ver a oficinistas, que de día son muy elegantes y educados, transformarse en borrachos y bullosos, gritando en el centro de la ciudad y hasta necesitando ayuda de sus compañeros para caminar.
Reflexionando sobre mis experiencias, recuerdo con vergüenza haber sobrepasado mis límites al beber con un compañero de trabajo, terminando vomitando mientras dormía y tirado en la alfombra de la casa de un amigo. Esta experiencia me sirvió de lección para moderar mi consumo de alcohol en el futuro.
Así que esta vez, les contare sobre las formas de disfrutar el alcohol en Japón, un verdadero paraíso para los amantes de la bebida.
En mi opinión, una de las mejores maneras de hacerlo es visitando un ‘Izakaya’, un tipo de establecimiento japonés donde la bebida y la comida se disfrutan en un ambiente relajado y amistoso.
En los izakayas se puede disfrutar de una amplia variedad de “tsumami” (tapas o aperitivos), que van desde opciones sencillas como edamame (vainas de soya) hervido con sal y papas fritas, hasta platos más elaborados como teppanyaki (carne a la plancha), okonomiyaki (pizza japonesa) y brochetas de pollo. Algunos izakayas se especializan en guisos cocidos a fuego lento, ofreciendo sabores intensos y tradicionales. Además, estos lugares tienen sus propias reglas y te contare algunas.
Básicamente izakaya es un bar donde se sirve alcohol y aunque algunos establecimientos tienen restricciones de edad, no es una práctica regulada por ley. Por lo tanto, se permite la entrada a menores y niños, siempre y cuando no consuman bebidas alcohólicas. Aunque parece muy loco llevar niños a las izakayas, pero muchas son lugares tranquilos y están separadas por cubículos para no molestar a otras personas.
Pero todo depende de la izakaya, la política de admisión varía y algunos pueden exhibir carteles en la entrada que prohíben la entrada a menores. A veces, la política no es evidente a simple vista, y las familias pueden ser rechazadas incluso si no hay señales que indiquen restricciones. Por ejemplo, durante un viaje familiar, llegamos en la noche a nuestro destino y no encontramos restaurantes abiertos y cerca. Por eso con mi esposa y mi hija de dos años intentamos entrar a un izakaya cerca de nuestro hotel para comer y aunque no tenía restricciones visibles para niños, nos rechazaron alegando que no había mesas disponibles.
Los izakayas de cadena suelen ser más acogedores con las familias, por lo que son una opción recomendable si planeas visitar uno con niños.
Una de las experiencias que suele sorprender a los extranjeros en los izakayas es el sistema de “Tsukidashi” (tapas incluidas), conocido como “Otoshi” en la región de Kanto. Es común que, tras hacer el primer pedido, aparezcan platos no solicitados en la mesa. Aunque pueden parecer un obsequio del establecimiento, estos aperitivos se cobran automáticamente por persona, con un costo promedio de entre 3 y 5 dólares. Aunque esta práctica es habitual en los izakayas, puede resultar muy malo, especialmente si los platos no son del agrado de todos. Creo que es mejor un sistema de pedido mínimo obligatorio para poder elegir a su gusto y así acabar con ese problema.
Es importante estar informado de esta costumbre para evitar malentendidos. Por otro lado, la diversidad de izakayas permite disfrutar de espacios que van desde lo privado a lo semiprivado, lo que añade al encanto de encontrar el lugar perfecto según el ánimo del momento.
En Japón, la frase “Toriaezu, Nama Biiru!” (¡Una cerveza de barril para empezar!) es un estándar en los izakayas. La primera bebida alcohólica que se pide suele ser una cerveza de barril, servida en una jarra mediana y conocida coloquialmente como “Namachu”. Esta expresión es esencial para los extranjeros que desean sumergirse en la experiencia de un izakaya, ya que refleja una parte integral de la cultura de bebida japonesa.
Dependiendo de la técnica del dispensador, podrás disfrutar de una cerveza exquisita; la habilidad con la que se vierte la bebida desde el grifo hasta un vaso helado puede crear una espuma perfectamente cremosa. Atrás quedaron los días, específicamente en la década de 1970, cuando la cerveza se sometía a un tratamiento térmico. Los avances actuales en la tecnología de filtración permiten que casi toda la cerveza se produzca sin este proceso, lo que significa que la cerveza de barril que disfrutamos en los bares izakaya es la misma que se vende en las licorerías, ya sea enlatada o embotellada. Pero, la técnica de vertido realza su sabor, convirtiéndola en una experiencia aún más placentera.
Aunque no soy un experto en cerveza, considero que si el camarero sirve la cerveza en una jarra congelada con la espuma adecuada, es posible saborear hasta tres vasos llenos de un sabor intenso y satisfactorio. Incluso si el precio es superior al de la cerveza embotellada, la experiencia en un izakaya es incomparable. Personalmente, recomendaría acompañar esta cerveza de barril con algo de cartílago frito sazonado con pimienta, aunque cada quien debería encontrar su acompañamiento ideal según su gusto personal.
En los últimos años, la cultura del consumo de alcohol ha experimentado un cambio significativo, adoptando un enfoque más personalizado y consciente. Beber a un ritmo personal es ahora la norma. Antes, especialmente entre los más jóvenes, existía una presión social para beber al unísono con colegas y amigos, creando un ambiente en el que no seguir el ritmo era mal visto, como si no se entendiera el ambiente social.
Esta presión, a menudo vista como una obligación, ha ido desapareciendo. La gente está más consciente de los riesgos asociados con el consumo excesivo de alcohol y ha aprendido a disfrutarlo de acuerdo a sus preferencias individuales.
Además, se está abandonando la nociva costumbre de consumir todo lo que ofrecen los mayores o los superiores, lo cual representa un progreso positivo hacia un consumo más responsable y personalizado del alcohol. Especialmente en Japón, donde muchas personas tienen menos enzimas para metabolizar el alcohol en comparación con otras poblaciones, lo que hace que el consumo excesivo sea particularmente perjudicial.
Aunque se reconoce que compartir bebidas puede tener efectos positivos, como relajar las tensiones sociales y potencialmente prevenir ciertas condiciones médicas, es crucial recordar que el alcohol es una sustancia adictiva que puede imponer una carga significativa en los órganos y representar un riesgo para la salud física y mental. Por tanto, es importante consumir alcohol con moderación y conciencia.
Para terminar, te recomiendo que visites una izakaya en Japón, que tengas buena suerte y disfrutes de la experiencia con responsabilidad y alegría. ¡Salud! ¡Kanpai!
日本でお酒はどのように楽しまれる?:
日本の居酒屋編
飲酒についての法律は各国様々である。私の妻の国、コロンビアでは18歳から飲酒する事ができるが、日本では20歳からと少し遅い。しかし、コロンビアでは大統領選挙など暴動が予見される場合、一時的に酒類の販売に制限がかかったり、バーでの飲酒が禁止されたりと、私たち日本人からすると少々厳しいように感じることがあるのも事実だ。他にも、いくつかの欧米諸国では公共の場での飲酒の制限や夜間は酒類の販売を禁止している国もある。日本では飲酒運転については重大事故になる可能性から厳しい罰則が設けられてはいるが、基本的に20歳以上であれば365日、24時間、コンビニやスーパーで酒類を購入し、酒場だけでなく公園や路上でも自由に飲酒ができる。更に夜の繁華街や電車の駅周辺では酩酊状態の一般人が路上を闊歩している事も珍しくない。そのことから、日本は世界的に見ても飲酒については非常に寛容な国の一つであると言える。
なまた、お正月のようなおめでたい“ハレの日”には、無病長寿を祈って“お屠蘇”と呼ばれる“おちょこに注がれた少量の日本酒などを年齢問わず飲む“伝統文化もある。(現在では未成年者は飲むふりをするのが一般的。)このようにお酒を身近なものとして捉える考えも浸透しており、現実には神経毒の一種であるアルコールではあるが、“お酒”が生活の一部として馴染んでいるのも確かである。
そして、ビールやカクテル、ウイスキー、ワイン、テキーラなど様々な国のお酒を田舎のアルコール取り扱い販売店でも購入する事ができるうえ、市町村単位で地酒が作られており、その種類も豊富である。
また、日本ではお酒の席において“無礼講”という概念があり、酩酊状態での多少の悪態は許される風潮がある。もちろん程度にもよるが、諸外国では酔いつぶれて悪態をつくとその人の人間性を疑われたり、その後の人間関係に悪影響を及ぼす事があるが、日本ではなぜか“酔っている”と言う事がある種の免罪符となっている。普段真面目に働いているスーツを着たサラリーマンがお酒に呑まれ繁華街で叫んでいたり、1人でまともに歩く事すらできず、同僚や部下に介抱してもらうという事も割とよくある話である。私自身も過去に遡ると、職場仲間と飲んだ際、恥ずかしながら自分の限界も鑑みず酔いつぶれて気がついたら寝ゲロを吐いて友人宅のカーペットの上に横になっていたと言う朧げな記憶が確かにある。若気の至りの教訓として、あれからは飲みすぎないように気をつけている。
今回は、そんな飲酒天国と言っても過言ではない日本でのお酒の楽しみ方の一つを個人的見解で書いていきたいと思う。
居酒屋でお酒を楽しむ。
日本の居酒屋はお酒もさることながら、お酒のあて、いわゆる“つまみ”を楽しむ場所でもある。一重に居酒屋と言っても、塩茹でした枝豆や乾き物のような簡単なつまみを取り揃えたものや、肉や粉物がメインの鉄板焼きや鶏肉を扱った串焼きがメインのもの、また、じっくり時間をかけて煮込んだ煮込み料理(臓物やスジ肉など)を提供するものなど、様々なタイプのものがある。そして、居酒屋には日本特有のルールがあるので、ここでは最も一般的なものを少し紹介してみる。
居酒屋は書いて字の如く、基本的にはお酒を提供するお店なので店舗によっては未成年者の利用には制限を設けている場合がある。しかし、法律で定められているわけではないので、基本的には店内でお酒を飲まないのであれば、未成年者や児童幼児であっても飲食は可能である。あとは店舗の采配に委ねられており、入り口に“未成年者や児童幼児お断り”を示している場合もあるが、示していないにも関わらず、拒否される場合もあったりと外観では判断が難しい。私も家族旅行中<妻と娘(当時2歳)>に宿泊ホテルの近くの子供お断りの表示のない居酒屋に入店したが、明らかに席が空いているにも関わらず、“満席”を理由に断られた事がある。フランチャイズ系の居酒屋は、家族連れの利用を積極的に受け入れている事が多いので、家族連れの場合はオススメできる。
そして、居酒屋で多くの外国人が驚くのが“突き出し”(関東では“お通し”)制度だ。最初の注文を終えて間もなく、全く身に覚えのない“つまみ”が突如として人数分運ばれてくるのだから当然ではある。お店側の粋な無料サービスかと思いきや、食べようが食べまいが、人数分きっちりお会計で請求されてしまう。居酒屋にもよるが、一般的な居酒屋の突き出しの相場は1人あたり500〜800円程度の品ではあるが、あまり万人受けするような料理でない事が多いのもいただけない。席料という意味合いもあるようだが、それならワンオーダー制にして食べたいもの注文したいものである。この制度は居酒屋と名のつくお店であれば、共通のルールなので知っていないとトラブルの原因となりえる。また、居酒屋によっては個室や半個室といったプライベート空間を提供するものもあり、個人の嗜好やその日の気分にあった居酒屋を探すのもまた楽しみの一つである。
“とりあえず、生ビール”と言う定番フレーズが日本にはあり、居酒屋で最初に飲むアルコールは、大抵の場合ビールサーバーから中ジョッキに注がれた生ビール(生中と略される。) で、最初の注文の際、こぞって使われるので、外国人の居酒屋体験には必須の言葉となるだろう。“生ビール”の“生”は“熱処理がされてない”と言う意味で、加熱ではなく濾過によって酵母を取り除いているので、ビール本来の新鮮さが保たれており、より豊かな味わいを楽しむ事ができる。加えて、サーバーからジョッキに注ぐ手法によってクリーミーな泡が生み出されたりと、注ぎ手のテクニックによってより美味しいビールが味わえる。しかしながら、過去(1970年代頃)には多くが熱処理ビールであったが、現在では濾過技術の進歩によってほぼ全てのビールが非加熱処理の生ビールであるため、実際は居酒屋で飲む生ビールも酒屋などで市販されている缶ビールや瓶ビールも生ビールで中身は同じである。しかし、注ぐテクニックよってより美味しくなるのも事実で、お酒にそこまで詳しくも強くもない私の感想としてもサーバーからキンキンに冷えたジョッキへ注がれビールにキメの細かいクリーミーな泡付きなら、3杯くらいはサラッと飲めてしまう。いくら中身が同じでも、瓶ビールより割高であっても、居酒屋でこれは外せない。個人的には、生ビールに胡椒強めの軟骨の唐揚げがあれば、最高だ。これは個人の好みなので自分の好きなスタイルぜひ見つけていただきたい。
近年では、お酒の飲み方自体も変わってきており、ようやく“自分のペース”で飲むのが主流になってきた。一昔前までは(特に若い男性の中で)、仕事仲間や友人とお酒を飲むと、お酒の一気飲みを煽る“コール”がかかり、一気飲みをしないと“空気が読めない奴”だと腐されるおかしな風潮があった。今では急性アルコール中毒の危険性や個々の嗜好に合わせた楽しみ方が理解されて、よほどおかしな人でない限り、煽ってくる人はいなくなった。加えて、目上の人にお酌をしてまわったり、目上の人から酌まれたお酒は飲みきらなければないないと言う異常な習慣も淘汰されつつあるのもいい風潮である。そもそも、多くの日本人の体質として、アルコールを分解する酵素が他人種と比べて少なく、アルコール飲料の過剰摂取には適さない人が大半である。それゆえに、自分の好きなアルコール飲料で、体質に合った合った量を、自分のペースで楽しく飲むのが言わずもがないいに決まっている。
アルコール飲料を伴ったコミュニケーションはリラックス効果による人間関係の円滑化や医学的には動脈硬化予防などのメリットがあるといわれている。しかしながら、あくまで、アルコールは薬物の一種で、依存性もあり、臓器への負担も大きく心身の健康を脅かす一面が大きい事を正確に理解したうえで付き合わなければならないのは大前提だ。
あなたの日本での居酒屋デビューに“乾杯”!!